Si Neverwinter es el orden, Luskan es el caos. Situada al norte, abrazando el gélido mar de la Espada, esta ciudad portuaria es un refugio para piratas, corsarios y criminales que buscan escapar de la justicia de los Lores de la Alianza. La ciudad se divide en dos por el río Mirar, conectada por puentes que a menudo son escenario de emboscadas y duelos al amanecer.
Aunque nominalmente gobernada por cinco Altos Capitanes (todos antiguos piratas), el verdadero poder de Luskan reside en la Torre del Huésped (Hosttower of the Arcane). Esta estructura imposible, que parece un árbol muerto de piedra negra con múltiples ramas, es el hogar de la Hermandad Arcana. Magos ambiciosos y amorales, liderados por Archimagos que no dudan en usar la nigromancia o los pactos infernales para asegurar su dominio sobre el Norte.
En Luskan, la fuerza hace el derecho. Los barcos de velas negras parten diariamente para asaltar las rutas comerciales hacia el sur. Sin embargo, es también un lugar de oportunidades para aquellos sin escrúpulos. Mercenarios, espías de los Zhentarim y contrabandistas del Underdark se reúnen en las tabernas brumosas como el "Alfanje Oxidado", donde los tratos se cierran en voz baja y las dagas nunca están enfundadas.